Y, para los que visitan esta página por azar decidles que, cada viernes santo de cada año, desde no se sabe cuando, este pueblo de Priego de Córdoba casi dobla su población porque, en sus calles están todos sus habitantes y también todos los que, siendo de Priego, tuvieron que emigrar años atrás. Todos salen a la calle a ver una procesión muy especial, la de Jesús Nazareno. Todos para ver una imagen cuya serenidad y mirada traspasa. Además, es llevada de una forma un tanto anárquica por cualquiera que pueda meterse bajo el trono, no sin antes tener que forcejear hasta ganarse un hueco bajo el varal. Son cientos los que desean llevarlo pero no hay sitio para todos. Viendo estas fotos se harán una idea de lo que ocurre bajo el trono. Es el gran día que ningún nacido en Priego se pierde por su voluntad. Y este Jesús Nazareno es una imagen que "engancha" y atrapa también a los no nacidos aquí, y emociona incluso a los no creyentes.

jueves, 19 de julio de 2012

Jesús se despide hasta otro año.

Su mirada lo dice todo. Jesús entra en su templo y esta chica, que está encaramada a las columnas de la fachada para tener una mejor vista del Nazareno, se despide también a su manera. Lo mira fijamente y sólo ella sabe lo que le corre por todo el cuerpo en esos momentos. El lazo que pende de la cruz no es sino el que abrazaba al manojo de habas que, ya a esas alturas de la procesión, se le han caido con tanto traqueteo.

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