Y, para los que visitan esta página por azar decidles que, cada viernes santo de cada año, desde no se sabe cuando, este pueblo de Priego de Córdoba casi dobla su población porque, en sus calles están todos sus habitantes y también todos los que, siendo de Priego, tuvieron que emigrar años atrás. Todos salen a la calle a ver una procesión muy especial, la de Jesús Nazareno. Todos para ver una imagen cuya serenidad y mirada traspasa. Además, es llevada de una forma un tanto anárquica por cualquiera que pueda meterse bajo el trono, no sin antes tener que forcejear hasta ganarse un hueco bajo el varal. Son cientos los que desean llevarlo pero no hay sitio para todos. Viendo estas fotos se harán una idea de lo que ocurre bajo el trono. Es el gran día que ningún nacido en Priego se pierde por su voluntad. Y este Jesús Nazareno es una imagen que "engancha" y atrapa también a los no nacidos aquí, y emociona incluso a los no creyentes.

jueves, 17 de febrero de 2011

El joven tambor busca con su mirada al Nazareno.

La carita de este chico representa fielmente la importancia y grandiosidad del momento. Está a punto de salir a la calle a tocar con su tambor, pero antes quiere echar una última mirada al Nazareno. Las puertas abiertas de par en par, los vivas a Jesús, la iglesia casi ocupada por inminentes costaleros, ... ¡ha llegado el momento tan esperado desde hace un año!, pero no desea echarse el verdugo sobre su cabeza sin antes ver una vez más al epicentro de nuestro gran viernes santo de Priego.

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