Y, para los que visitan esta página por azar decidles que, cada viernes santo de cada año, desde no se sabe cuando, este pueblo de Priego de Córdoba casi dobla su población porque, en sus calles están todos sus habitantes y también todos los que, siendo de Priego, tuvieron que emigrar años atrás. Todos salen a la calle a ver una procesión muy especial, la de Jesús Nazareno. Todos para ver una imagen cuya serenidad y mirada traspasa. Además, es llevada de una forma un tanto anárquica por cualquiera que pueda meterse bajo el trono, no sin antes tener que forcejear hasta ganarse un hueco bajo el varal. Son cientos los que desean llevarlo pero no hay sitio para todos. Viendo estas fotos se harán una idea de lo que ocurre bajo el trono. Es el gran día que ningún nacido en Priego se pierde por su voluntad. Y este Jesús Nazareno es una imagen que "engancha" y atrapa también a los no nacidos aquí, y emociona incluso a los no creyentes.

viernes, 22 de abril de 2011

Otro viernes santo deslucido por el agua.

Aunque el verdadero chapetón cayó una vez encerrado el Nazareno, leves chubascos intermitentes deslucieron la procesión e impideron salir al resto de los pasos. Aún así, se subió al Calvario, no se pasó calor, al Nazareno le ponían y le quitaban la capota (según disponía la meteorología) y la gente se volcó, como siempre, en el día más grande de este pueblo. Para mí fue un viernes santo muy emotivo y lleno de satisfacciones. Un día muy esperado. Iremos colgando fotos poco a poco durante todo el año, semana a semana, hasta esperar pacientemente el próximo viernes santo, al que ya le estamos contando los días. Mientras tanto el domingo de mayo dedicado a esta Hdad. está ya encima.

3 comentarios:

  1. Estoy deseando que publiques las fotos del dia de hoy, porque seguro que merecen la pena y mucho.

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  2. Para mí ha sido uno de los mejores Viernes Santo de mi vida, y explico por qué: desde la noche del jueves santo no paraba de darme vueltas en la cabeza la idea de meterme como todo nazareno prieguense a llevar a Jesús sobre mis hombros, sabía que ésta era mi gran oportunidad y esperé la ocasión perfecta para poder hacerlo. La bajada por la calle Río era la mejor ocasión para un joven inexperto como yo, pues el casancio de los más veteranos costaleros delataba que era mi hora.
    Por fin, después de muchos achuchones y de zafarme de los tirones de la gente, puede enfilarme y colocarme en el bullicio que había delante del trono de Jesús.
    Fue cuando por mi cabeza pasaban miles de dudas, pero me armé de valor y me dije, ¡¡ésta es la tuya!! y con todas mis fuerzas conseguí meter el hombro y acto seguido, sentí una presión profunda en el pecho. Sabía que estaba llevando a Jesús, al Rey de Priego.

    Siento una gran satisfacción por haberme sentido costalero por unos minutos, y desde aquí felicito a Priego entero.

    Ánimo Jose Luis, esperamos tus fotos.

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  3. MUY BUENAS LAS FOTOS, EL DEL TAMBOR QUE SE VE EN LA FOTO SOY YO, SIGUE SUBIENDO FOTOS TE LO ESTAS CURRANDO MUCHO ARTISTA. UN SALUDO

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